lunes, 21 de julio de 2008

Luna

Que distante se ha hecho el deseo que pedí una noche de luna llena, aquel deseo que le pedí a la luna bajo su agraciada luz en una noche tranquila, aquel anhelo por el cual las lagrimas cayeron y se volvieron rojas bajo la revelación sagrada. Hoy en el amanecer resurgen mis memorias y con ello el sueño que pedí se hiciera realidad, y la alborada me ha susurrado verdades que parecen solo tristes invenciones de las sombras que recorren mis pensamientos, de la desesperación que me traen los recuerdos, por eso hoy me adentro en lo mas profundo de este bosque para vivir solo un instante de nuevo en mis recuerdos y para ver como el rojo de las lagrimas que cayeron ese día cubría aquel lugar de un hermoso carmesí.

Mientras recorro el bosque el cielo me cobija, cielo que ahora se viste de un color opaco, que se viste de delicadeza y de miedo, y al mismo tiempo las nubes quieren romper en llanto para inundar la tierra de grises gotas, para cubrir el camino que me conduce hasta el recinto donde se hallan los designios de la luna, donde ahora duerme un deseo, una vida. El tiempo se detiene lentamente como si no quisiera que llegase temprano a ese decisivo encuentro, pero continúe sin pedir explicación alguna pues solo quiero verla una vez mas para poder expresarle que sentía en aquel momento en el que estaba bajo su luz, en el que descubría como mi existencia tomaba forma entre las dudas, como quería hacerse una sola con su destino.

Contemplo a lo lejos el final de este sendero que me conduce hasta ella, ya parece el firmamento hacer gala de un frágil purpura simbolizando asi el final de su descanso, mas ahora quiero verla dormida pues quiero apreciar su tranquilidad, quiero disfrutar de su dulzura, al menos por un instante antes de que mi corazón empiece a latir rápidamente, antes de que me pierda en su mirada y su voz me fascine con bellas melodías, antes de que me susurre dulces palabras que me hagan caer en lo mas profundo de la imaginación. Asi la noche pasa rápido, pero lo que siento se convierte en una esencia duradera que alegra mi corazón, por eso hoy solo espero que con mis palabras entienda que es lo que tanto anhelo, cual es mi verdadero sueño.

Pude sentarme a su lado y en ese instante una gran emoción invadió todo mi ser, quise tomar sus manos para sentir su calidez, quise tomarlas para que también sintiera todo el afecto que le tengo, para que descubriera cuanto podría yo brindarle de lo que ella me ha dado. Le cante para recordarle lo que ella me había cantado, lo cante pensando en su alma, pensando en los momentos que disfrutamos. Le susurre dulces palabras asi esperando que fueran de su agrado, como para mi lo eran cuando ella con fervor me las decía. Le di un abrazo esperando a que ella sintiera el latir de mi corazón, asi como yo había sentido el suyo con solo tocar sus manos. Ahora quiero sentir su corazón junto al mío, porque ese mi verdadero deseo, mi unico sueño.

No hay comentarios: